Una nueva y grave dificultad enfrenta la industria de la salmonicultura como consecuencia de la crisis de empleo que afecta a los pesqueros artesanales a causa de la presencia de la marea roja en Chiloé.
A consecuencia de la masiva movilización, las salmoneras que operan en Chiloé tienen dificultades para sacar la producción de sus plantas de proceso, debido a que las protestas a las manifestaciones en Ancud, Quellón y Queilén, las que derivaron en tomas de rutas y prácticamente el bloqueo de los accesos a la Isla Grande.
Fuentes del sector estimaron que las pérdidas económicas por estos bloqueos ascendían a US$ 15 millones hasta la noche del lunes y que podrían sumarse unos US$9 millones diarios.
Fuente: Emol.com